El estudio realizado por el Instituto para la Seguridad Ciudadana (ISC), para el proyecto “Casas y Calles Seguras” revela que en los últimos seis meses, el 62% de la población del Chilca percibe un incremento de la delincuencia, lo cual se atribuye principalmente al desempleo y a la falta de trabajo. Estas cifras se desprenden de la encuesta aplicada a una muestra de 500 hogares del populoso distrito.
Los pobladores de Chilca perciben que la delincuencia, la falta de limpieza de las calles y de recojo de basura, el desempleo, el alcoholismo y el pandillaje son los principales problemas que atraviesa el distrito. El robo en las calles y en las casas son los delitos más recurrentes y de mayor preocupación para los hogares encuestados.
En el caso del pandillaje juvenil que se manifiesta con mayor frecuencia en las zonas urbano-marginales, donde la pobreza y la desatención por parte de las instituciones estatales es incontestable, como lo muestran los datos. Para el 26% de encuestados el pandillaje es uno de los principales problemas.
El estudio también recogió algunas medidas de prevención como: programas de apoyo a jóvenes para evitar que caigan en el delito (61,4%), apoyo a la creación de organizaciones vecinales nuevas y más poder a las organizaciones vecinales existentes (38.0%), aumento número de policías (20,2%), sentenciar a penas de servicio a la comunidad a quienes cometen faltas o delitos menores (23,5%), y mejorar la situación económica del distrito (29,5%).
El 58,9% de los encuestados manifestaron estar de acuerdo que la población tome en sus manos el castigo de los delincuentes, el test de los linchamientos que contraviene la ley penal aparece sorprendentemente en la encuesta. Los resultados también nos indican que la lenta o nula reacción de la policía frente a las denuncias y la falta de justicia para castigar un delito, hacen que la población encuentre en esta medida la necesidad de dar un escarmiento a los delincuentes.
Asimismo, hay una actitud favorable al endurecimiento de las penas para castigar los delitos comunes. El 80% de los encuestados tiene poca o ninguna confianza en la labor que desempeña la policía, lo que no sucede en el caso de las Juntas vecinales y a veces del Municipio.
El actual alcalde tiene una percepción positiva por parte de la población de Chilca. Sin embargo, aun existen demandas pendientes por parte de los vecinos en cuanto a temas de necesidades básicas como salud, agua, desagua, entre otros. Así como, los vinculados a la seguridad ciudadana, en donde existe una disociación entre las actividades realizadas por las juntas vecinales organizadas y las actividades del municipio.
El estudio se realizó como parte de las actividades del proyecto “Casas y Calles Seguras” distrito de Chilca, provincia de Huancayo, región Junín, ejecutado por el Instituto para la Seguridad Ciudadana (ISC) en el marco del trabajo interinstitucional suscrito con la Municipalidad Distrital de Chilca.
Más información:
Instituto para la Seguridad Ciudadana
Of: 064-212064
isc.comunicaciones@hotmail.com
Blog: www.casasycallesseguras.blogspot.com
Los pobladores de Chilca perciben que la delincuencia, la falta de limpieza de las calles y de recojo de basura, el desempleo, el alcoholismo y el pandillaje son los principales problemas que atraviesa el distrito. El robo en las calles y en las casas son los delitos más recurrentes y de mayor preocupación para los hogares encuestados.
En el caso del pandillaje juvenil que se manifiesta con mayor frecuencia en las zonas urbano-marginales, donde la pobreza y la desatención por parte de las instituciones estatales es incontestable, como lo muestran los datos. Para el 26% de encuestados el pandillaje es uno de los principales problemas.
El estudio también recogió algunas medidas de prevención como: programas de apoyo a jóvenes para evitar que caigan en el delito (61,4%), apoyo a la creación de organizaciones vecinales nuevas y más poder a las organizaciones vecinales existentes (38.0%), aumento número de policías (20,2%), sentenciar a penas de servicio a la comunidad a quienes cometen faltas o delitos menores (23,5%), y mejorar la situación económica del distrito (29,5%).
El 58,9% de los encuestados manifestaron estar de acuerdo que la población tome en sus manos el castigo de los delincuentes, el test de los linchamientos que contraviene la ley penal aparece sorprendentemente en la encuesta. Los resultados también nos indican que la lenta o nula reacción de la policía frente a las denuncias y la falta de justicia para castigar un delito, hacen que la población encuentre en esta medida la necesidad de dar un escarmiento a los delincuentes.
Asimismo, hay una actitud favorable al endurecimiento de las penas para castigar los delitos comunes. El 80% de los encuestados tiene poca o ninguna confianza en la labor que desempeña la policía, lo que no sucede en el caso de las Juntas vecinales y a veces del Municipio.
El actual alcalde tiene una percepción positiva por parte de la población de Chilca. Sin embargo, aun existen demandas pendientes por parte de los vecinos en cuanto a temas de necesidades básicas como salud, agua, desagua, entre otros. Así como, los vinculados a la seguridad ciudadana, en donde existe una disociación entre las actividades realizadas por las juntas vecinales organizadas y las actividades del municipio.
El estudio se realizó como parte de las actividades del proyecto “Casas y Calles Seguras” distrito de Chilca, provincia de Huancayo, región Junín, ejecutado por el Instituto para la Seguridad Ciudadana (ISC) en el marco del trabajo interinstitucional suscrito con la Municipalidad Distrital de Chilca.
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